

Hoy el Defensor del Pueblo Carlos Camargo da la espalda a la Minga Indígena y la protesta Nacional.
Es gravísimo que el día de hoy 10 de mayo en la Universidad del Valle, el Defensor del Pueblo ante la incapacidad de dar respuesta a las graves violaciones de derechos humanos con la Minga Social Nacional salió corriendo sin dar explicaciones ni mucho menos mostró su voluntad para aunar ejercicios de diálogo, escucha, construcción e intermediación ante las últimas situaciones. Su actitud, señor Defensor es omisiva y contraria a constitución.
Señor Defensor recordar, que más allá de acompañar a la protesta, es imperativo constitucional de la Defensoría del Pueblo: visibilizar y denunciar las graves violaciones a los DDHH cometidos por el mismo Estado ante el actual paro nacional. Así mismo, exigir garantías a las demás órganos e instituciones que hacen parte del poder público, generar verdaderos espacios de diálogo, intermediación, concertación, defender los Derechos Humanos, prevenir sus violaciones y fomentar la observancia internacional.
Actualmente no existe informes oficiales que reflejen las verdaderas violaciones de derechos humanos, por lo tanto, existen graves omisiones en cuanto a los reportes de la defensor nacional sobre la verdadera crisis y vulneración en diversos regiones del país en relación al Paro Nacional, el uso excesivo y desmedido de la fuerza y la militarización en las diferentes ciudades, lo que ha generado un sin número de muertos y heridos como es el caso de los hechos violentos ocurridos el día 9 de mayo en la ciudad de Cali contra los miembros de la minga indígena, poniendo en grave riesgo la integralidad y pervivencia.
Señor Defensor del Pueblo, los derechos humanos y el goce efectivo de los mismos se monitorean en territorio, escuchando y caminando con la ciudadanía, las fuerzas sociales y la protesta social de acuerdo a la actual coyuntura. Por tanto, es un deber constitucional garantizar los derechos y velar por la dignidad, por los estamentos de la democracia y la vigencia de los mismos.
Por lo tanto, rechazamos la actitud del Defensor Nacional cuando la Minga y las demás organizaciones presentes exponían las graves afectaciones y violaciones de los derechos humanos por la fuerza pública y la omisión de las entidades estatales.
Por dignidad si no está en su ser el imperativo moral y social de proteger y velar por los derechos humanos le exigimos que se haga a un lado para recuperar la confianza en la institución y de esa manera recuperar la esperanza de la ciudadanía, las organizaciones sociales y la sociedad en general.
CONSEJO REGIONAL INDIGENA DEL CAUCA CRIC